Según ha subrayado Antonio Gómez, integrante de la Cordinadora Anti-Privatización de la Sanidad de Madrid, “nosotros nos posicionamos en contra de la repatriación del sacerdote español, porque veiamos que era un riesgo gravísimo repatriar a una persona con ébola cuando no existe tratamiento efectivo contra este virus ni aquí, ni en África”. En ese sentido, Gómez ha añadido que desde la Coordinadora Anti-Privatización de la Sanidad de Madrid defendieron desde un principio que “el Estado español se implicase y enviase hospitales de campaña y recursos para contener la epidemia allí donde estaba”. Para Antonio Gómez ”se corría el riesgo de importar premeditadamente el virus, como ha ocurrido”. El miembro de la coordinadora anti-privatización también ha denunciado la hipocresía existente en torno a este tema, ya que, “en África hace tiempo que mucha gente esta muriendo por el ébola”.

 

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