Aratz Estonba estaba ayer en la explanada de la basílica de Loiola como abogado y asesor jurídico de los jóvenes del Askegunea. A pesar de ello, y al igual que otros tantos profesionales del periodismo que realizaban también su trabajo junto al muro popular, Estonba fué expulsado del lugar de los hechos. Para el letrado donostiarra “ayer, cualquier testigo en el Askegunea era incómodo” para la policía autonómica.